La loción Zebratan, para cubrir perfectamente el vitíligo, incluye DHA que es un ingrediente activo autobronceador.

Pero al aplicarlo el resultado es diferente, ya que se han estudiado ciertos puntos para evitar que queden tonalidades demasiado pronunciadas, no uniformes y anaranjadas.

1. No más look naranja

Un autobronceador clásico suele tener fama de dar a la piel un aspecto anaranjado. Si se aplica una capa demasiado generosa, rápidamente acabarás con el aspecto de una calabaza, ¡sobre todo a la luz del día!

Con la loción, este tipo de molestia está diseñado para evitarse. Además, la aplicación con esponja permite una aplicación perfecta y uniforme, lo que evita una aplicación demasiado aproximada. Los aplicadores de precisión también proporcionan resultados impecables.

2. Elección del tono

Por lo general, un producto autobronceador no cumplirá con todas las expectativas, porque en cuanto a tonos, estos productos no siempre vienen en varios tonos.

Las lociones están disponibles en 4 tonos, con 4 ajustadores que te permiten crear tu propia solución personalizada.

3. ¡Está en la bolsa!

Los autobronceadores no siempre vienen en tamaños pequeños y generalmente no vienen con aplicadores.

Las lociones Zebratan están diseñadas para ser fáciles de llevar, especialmente por su pequeño tamaño, que cabe en el bolsillo o el bolso. Es reconfortante saber que siempre puedes retocar tu loción por si acaso.

4. Una dosis personalizada

La mayoría de las veces, los productos autobronceadores se venden en forma de spray.

Esponja, guante, aplicador de precisión, brocha. Con las lociones, elegimos la punta que mejor nos conviene para lograr la dosis perfecta que crea la sensación de una segunda piel.

5. Verano e invierno

Tenemos tendencia a pensar en el autobronceado sólo en verano, porque en invierno queda demasiado anaranjado.

Jugar con dos tonos es una buena opción; por ejemplo, beige claro en invierno y beige marrón en verano. O incluso unas gotas de corrector para oscurecer y perfeccionar tu tono de verano.